Peñafalcón Siglo XI, Gran Reserva 2006, 5 años en barrica
96,78€
Tipo de vino
Tinto, Gran Reserva
Grado de alcohol
15,5%
Temperatura
16º-18º
Variedades
100% Tempranillo
Maridaje
Carnes rojas, guisos y caza
Vista
Color rojo rubí de capa media, ribete ligeramente atejado, limpio, brillante y con abundante lágrima, ancha y de lenta caída por la pared de la copa sin arrastrar color.
Peñafalcón siglo XI Gran Reserva 2006, se elaboró a partir de uvas seleccionadas de viñedos de tempranillo posicionados en laderas altas con terruños calcáreos pedregosos. Objetivo que se consigue con la altitud en la que se sitúan dichos viñedos y la diferencia de temperaturas entre el día y la noche durante los meses de maduración, factores que favorecen la lenta maduración de la uva obteniendo de este modo abundante presencia de fruta madura y una mayor acidez. Durante la fermentación son las levaduras provenientes del viñedo, de la tierra, las que hacen su trabajo y como siempre, marca de la casa, un largo , delicado y esmero reposo de 60 meses en barricas de roble americano ( con el que se pretende una oxigenación lenta que deje sentir toda su gran complejidad aromática) y roble francés de grado fino ( con el que se gana en sutileza para ofrecer vinos más austeros pero con más matices: balsámicos, pimienta, tabaco, panadería, frutos secos tostados) de tostado medio plus para alcanzar un equilibrio con matices de especias y frutos secos. PREMIOS: Medalla de Gran Oro, nivel internacional ( catavinum world wine spain 2016), medalla de oro, nivel internacional (international wine guide spain 2015)
Vino que cambia constantemente a medida que lo tenemos en la copa, vino de complejidad, elegancia e intensidad espectaculares. En boca es suave, elegante y equilibrado, con un paso redondo notable cuerpo, de taninos dulces y aterciopelados junto a una muy buena acidez que le aporta frescura y le ha mantenido vivo durante todo este tiempo. Final largo con notas en retrogusto a trufa negra, champiñón, setas, algo de chocolate y herbáceos junto a regaliz, especias, tostados, maderas finas, balsámico y frutos negros maduros en retronasal que lo redondean a la perfección.
Nariz de intensidad media pero dotada de gran complejidad y profundidad destacan multitud de matices aromáticos que van desde los finos cueros pasando por recuerdos terrosos, tabacos, delicadas notas especiadas hasta sutiles aromas de frutas negras muy maduras, licorosas, sobre un fondo de notas ahumadas, frutos secos y torrefactos
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